Así
escribo…
Ramón Martínez de Velasco
“Cuando escribo no me detengo, porque si me detengo me alcanzo”:
Efraín Huerta.
Ésta es un a columna de opinión.
Pertenece, pues, al terreno del
periodismo.
No al de la divulgación.
No al de la difusión.
Tampoco al de la llamada
‘comunicación social de la ciencia y la tecnología’, aunque a ratos puede pisar
ese almácigo.
A mi maestro de Géneros Periodísticos
en la UNAM , don
Fernando Benítez, le debo algunas recomendaciones que me fueron muy útiles para
la profesión.
Una de ellas la adopté como
filosofía de vida: “A mí no me interesa cuánto sabes. A mi lo que me interesa
es cuánto entiendes”.
Rumié tanto aquella convicción de
mi maestro, que un buen día caí en la cuenta de que en los diarios y en los noticiarios
hay de todo, pero nada conduce a ningún lado.
También entendí que “el
periodismo consiste en informar que ‘lord Jones ha muerto’, a gente que no
sabía que lord Jones estaba vivo”.
Entendí, atónito, que en México
hay periódicos sin periodistas.
Así que abandoné la reporteada y
me incliné por la corrección de estilo.
Luego abandoné al ‘periodismo
chatarra’ y me fui por el lado de la ciencia y la tecnología.
Donde hay de todo.
Y aquí lo iré destejiendo.
Tormenta perfecta
En esta columna siempre habrá
imágenes.
Tengan o no que ver con el texto.
Para inaugurar este espacio, les
muestro algunas fotografías.
Fueron tomadas en la carretera
Querétaro-Ciudad de México.
El autor es hermano mío: Fernando
Martínez de Velasco.
Gócenlas.
Estimados Hermanos Ramirez de Velasco, simplemente esplendido.
ResponderEliminarGracias